ACEA pide que el aumento de los objetivos de CO2 vaya acompañado de una
mejora considerable de la implantación de infraestructuras, así como de
un marco reforzado de incentivos y de tarificación del carbono
La Comisión propone la introducción progresiva de normas de emisiones de CO2 más estrictas para casi todos los vehículos pesados nuevos con emisiones de CO2 certificadas, en comparación con los niveles de 2019, en concreto
- Reducciones del 45 % de las emisiones a partir de 2030;
- 65% de reducción de emisiones a partir de 2035;
- reducción del 90% de las emisiones a partir de 2040.
Para estimular un despliegue más rápido de autobuses de emisiones cero en las ciudades, la Comisión también propone que todos los autobuses urbanos nuevos sean de emisiones cero a partir de 2030.
En consonancia con los objetivos del Pacto Verde Europeo y REPowerEU, esta propuesta también tendrá un impacto positivo en la transición energética, al reducir la demanda de combustibles fósiles importados y aumentar el ahorro de energía y la eficiencia en el sector del transporte de la UE. Proporcionará beneficios a los operadores y usuarios del transporte europeo al reducir los costes de combustible y el coste total de propiedad, y garantizará un mayor despliegue de vehículos más eficientes energéticamente. También mejorará la calidad del aire, sobre todo en las ciudades, y la salud de los europeos.
Además, se trata de un sector clave para apoyar la industria europea de tecnologías limpias e impulsar la competitividad internacional. La UE es líder del mercado en la producción de camiones y autobuses, y un marco jurídico común contribuye a asegurar esa posición de cara al futuro. En particular, las normas revisadas proporcionan una señal clara y a largo plazo para orientar las inversiones de la industria de la UE en tecnologías innovadoras de emisiones cero e impulsar el despliegue de infraestructuras de recarga y repostaje.
Con 340 votos a favor, 279 en contra y 21 abstenciones, los eurodiputados han respaldado el acuerdo alcanzado con el Consejo sobre las normas revisadas de comportamiento en materia de emisiones de CO2 de los turismos y furgonetas nuevos, en línea con la mayor ambición climática de la UE.
La nueva legislación establece el camino hacia las emisiones cero de CO2 para los turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos en 2035 (un objetivo para toda la flota de la UE de reducir las emisiones de CO2 producidas por los turismos y furgonetas nuevos en un 100% en comparación con 2021). Los objetivos intermedios de reducción de emisiones para 2030 se fijan en el 55% para los turismos y el 50% para las furgonetas.
Otras medidas clave previstas por el Reglamento:
- La Comisión presentará antes de 2025 una metodología para evaluar y notificar datos sobre las emisiones de CO2 a lo largo de todo el ciclo de vida de los coches y furgonetas vendidos en el mercado de la UE, acompañada de propuestas legislativas cuando proceda;
- Para diciembre de 2026, la Comisión supervisará la diferencia entre los valores límite de emisión y los datos de consumo de combustible y energía en el mundo real, informará sobre una metodología para ajustar las emisiones específicas de CO2 de los fabricantes y propondrá medidas de seguimiento adecuadas;
- Los fabricantes responsables de pequeños volúmenes de producción en un año natural (de 1 000 a 10 000 turismos nuevos o de 1 000 a 22 000 furgonetas nuevas) podrán acogerse a una excepción hasta finales de 2035 (los que matriculen menos de 1 000 vehículos nuevos al año seguirán estando exentos);
- El actual mecanismo de incentivos para los vehículos de emisiones cero y bajas (ZLEV), que recompensa a los fabricantes que venden más vehículos de este tipo (con emisiones de cero a 50 g de CO2/km, como los vehículos eléctricos y los híbridos enchufables de buen rendimiento) con objetivos de reducción de emisiones de CO2 más bajos, se adaptará para satisfacer las tendencias de ventas previstas. De 2025 a 2029, el punto de referencia ZLEV se fija en el 25% para las ventas de turismos nuevos, y en el 17% para las furgonetas nuevas, y a partir de 2030 se suprimirá el incentivo;
- Cada dos años, a partir de finales de 2025, la Comisión publicará un informe para evaluar los avances hacia una movilidad por carretera con cero emisiones.
ACEA pide que el aumento de los objetivos de CO2 hag que haya una mejora en infraestructuras
En respuesta a la propuesta de la Comisión Europea sobre nuevas normas de CO2 para camiones y autobuses publicada hoy, la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) pide que el aumento de los objetivos de CO2 vaya acompañado de una mejora considerable de la implantación de infraestructuras, así como de un marco reforzado de incentivos y de tarificación del carbono
Camiones
"Estamos preparados para cumplir", declaró Martin Lundstedt, Presidente de la Junta Directiva de Vehículos Comerciales de ACEA y Consejero Delegado del Grupo Volvo. "Sin embargo, alcanzar el -45% ya en 2030 es muy ambicioso. Requeriría una acción igualmente ambiciosa por parte de los responsables políticos para garantizar que los demás actores de la cadena de valor del transporte y la logística cumplan al mismo tiempo."
Una reducción del CO2 del 45% para 2030 significa que tendrían que circular más de 400.000 camiones de emisiones cero y matricularse al menos 100.000 nuevos camiones de emisiones cero al año. Esto requeriría más de 50.000 cargadores de acceso público adecuados para camiones que deberían estar en funcionamiento en sólo siete años, de los cuales unos 35.000 deberían ser cargadores de alto rendimiento (sistema de carga de megavatios). Además, se necesitarían unas 700 estaciones de recarga de hidrógeno.
"Dado que hoy en día faltan casi por completo estaciones de recarga adaptadas a las necesidades específicas de los camiones, el reto que tenemos por delante es enorme", declaró Sigrid de Vries, Directora General de ACEA. "Nos preocupa que sólo los fabricantes de vehículos se enfrenten a elevadas penalizaciones si otras partes interesadas no cumplen su papel a la hora de hacer esto posible - especialmente dado el bajo nivel de ambición que los estados miembros están mostrando en el Reglamento de Infraestructuras de Combustibles Alternativos (AFIR)."
En este mercado B2B, los transportistas también deben estar en condiciones de hacer funcionar vehículos de emisiones cero de forma más rentable que los camiones diésel convencionales. "Si esto no ocurre rápidamente, los operadores no comprarán nuestros vehículos y, en consecuencia, sencillamente no podremos cumplir los objetivos de CO2", declaró Lundstedt. "Al fin y al cabo, la tecnología de los vehículos -ya sean camiones eléctricos de batería, de pila de combustible o de hidrógeno- es sólo una parte de la solución. Para tener éxito en esta transición de nuestra industria, necesitamos urgentemente políticas coherentes y conjuntas."
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| ACEA pide que el aumento de los objetivos de CO2 vaya acompañado de una mejora en infraestructuras |
Autobuses
Establecer un objetivo del 100% para los autobuses urbanos ejercerá una enorme presión sobre todos los operadores de transporte público para que ajusten sus planes de inversión en consecuencia (y garanticen la infraestructura necesaria de recarga y repostaje en las cocheras). También se corre el riesgo de que los operadores de transporte público se apresuren a comprar los últimos autobuses convencionales.
Falta de coordinación con Euro 7
ACEA está alarmada por la falta de coordinación entre las propuestas actuales sobre CO2 y la propuesta Euro 7 para vehículos pesados publicada hace sólo unos meses, que pretende abordar las emisiones del tubo de escape de los vehículos con motores de combustión interna. Euro 7 no debe desviar la atención de la transición hacia la neutralidad climática, y debe ser coherente con la inversión necesaria para las normas de CO2, advierte ACEA.
"Mientras otras regiones del mundo incentivan su camino hacia la movilidad de emisiones cero, Europa intenta regular el suyo, y ni siquiera eso se hace de forma armonizada", declaró Lundstedt.
ACEA analizará ahora la propuesta con más detalle y está dispuesta a colaborar con todas las partes para hacer realidad la transición hacia un transporte por carretera de emisiones cero.
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