Los vehículos siguen subiendo de precio y de complejidad, lo que hace que los que tienen unos ingresos mínimos o conocimientos técnicos se enfrenten a estos robots de conducción. Utilizando la producción, el embalaje y la base de consumidores de IKEA junto con la avanzada red de movilidad de Renault. Höga está diseñado para aquellos que necesitan simplemente ir de A a B o incluso a Z con la conexión de Mobilize.
Los productos siempre tienen un aspecto estupendo en el estudio, pero ¿qué pasa cuando lo llevas a casa? Aquí tienes la prueba de que te encantará Höga incluso el lunes, de camino al trabajo. Diseñados para destacar, nunca te perderás otro Höga en la jungla de cemento, especialmente cuando aparques en pareja.
Este estudiante del College for Creative Studies mezcla el concepto de compra de Ikea con la idea de un coche eléctrico económico fabricado por Renault. El kit que se vendería en estos establecimientos se entrega directamente en una caja con 374 piezas, aunque algunas llegarán ya montadas, así el comprador solamante tendría que montar un total de 114.
Una vez montado, el resultado es un coche eléctrico, o más bien a un cuadriciclo eléctrico, muy parecido al Citroën Ami.
En el modelo puertas se abren desde la parte frontal y debajo del asiento del conductor hay cajonera lateral.
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Renault Höga, un coche eléctrico por piezas para montar en casa que compras en IKEA |
El Höga (que significa ‘alto’ en sueco), una vez montado siguiendo las instrucciones que se incluyen en la caja, tiene una longitud de 2,23 metros y 1,8 metros de alto. Su aspecto cúbico busca facilitar el proceso de montaje, que llevaría algunas horas, y también crear un habitáculo lo más espacioso posible, facilitado porque las ruedas se sitúan prácticamente en cada una de sus cuatro esquinas. Según su creador, en su interior podría incluso transportarse una bicicleta en posición vertical, a la derecha del conductor o un carrito de bebé.
La puerta por la que se accede a su interior se sitúa en la parte delantera, mediante un sistema que eleva todo el panel, incluido el volante como pasaba con el BMW Isetta, y en el que se inspira, aunque en este caso la apertura es hacia arriba. En su interior, el tablero de mandos se reduce a la mínima expresión: el Renault Höga es todavía más minimalista que el Ami, ya que solo incluye un volante (que por cierto hace girar las cuatro ruedas) . No tiene pantalla de información, esa función se confía al teléfono o a una tablet que corre a cargo del usuario.
Ambas compañías aprovecharían los mejor de sí mismas. Renault, su alta capacidad de fabricación y experiencia con los coches eléctricos compactos y baratos. E IKEA su capacidad para diseñar y vender artículos por piezas, que el cliente monta en casa.
El Höga es un coche eléctrico de dos plazas, completamente modular, con un precio de alrededor de los 6.000 o 6.200 euros.
Las normas de seguridad actuales para comercializar un vehículo exigen que haya sido ensamblado previamente por una línea de producción dotada de trabajadores cualificados y cumpliendo todos y cada uno de los requisitos del control de calidad que se exigen. El Renault Höga, tendría pocas posibilidades de pasar los test de choque de Euro NCAP y sacar algo más de una estrella.
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Así,que el Renault Höga es un coche eléctrico por piezas que compras en IKEA y lo montas en casa ideado por Ryan Schlotthauer un diseñador industrial que ha creado varios conceptos de vehículos para Rivian, Honda, GM
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