La Fiscalía alemana ha registrado este martes la sede de Volkswagen, situada en la ciudad germana de Wolfsburgo debido de nuevo sus motores diésel, en concreto un eventual problema con el motor diésel EA 288.
Los fiscales dijeron que los investigadores tenían como objetivo confiscar documentos. Volkswagen, que admitió en 2015 hacer trampa en las pruebas de emisiones de EE. UU. En motores diesel, dijo que estaba cooperando completamente con las autoridades, pero consideró que la investigación era infundada.
Según la multinacional alemana Volkswagen, la entrada de las autoridades en su sede está relacionada con el caso de los motores diésel tipo EA 288, una versión posterior al EA 189, que estuvo vinculado con el caso del trucaje de los motores, que ya se conoció en 2015 y es conocido como ‘diesélgate’.
Volkswagen dijo que cuando estalló el escándalo, alrededor de 11 millones de vehículos en todo el mundo estaban equipados con el software ilegal. Vía autonews
Los fiscales dijeron que los investigadores tenían como objetivo confiscar documentos. Volkswagen, que admitió en 2015 hacer trampa en las pruebas de emisiones de EE. UU. En motores diesel, dijo que estaba cooperando completamente con las autoridades, pero consideró que la investigación era infundada.
Según la multinacional alemana Volkswagen, la entrada de las autoridades en su sede está relacionada con el caso de los motores diésel tipo EA 288, una versión posterior al EA 189, que estuvo vinculado con el caso del trucaje de los motores, que ya se conoció en 2015 y es conocido como ‘diesélgate’.
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La planta de Wolfsburg es la principal planta de producción del Grupo Volkswagen |
La empresa automovilística destacó que este problema con el propulsor EA 288 está siendo estudiado a través de una nueva investigación y también que esto lo había comunicado a las autoridades correspondientes.
En simulaciones, los vehículos con el motor EA 288 no indicaron un fallo en el filtro de diesel, mientras cumplían con los límites de emisiones, dijo Volkswagen, y agregó que el motor no tenía un dispositivo de desactivación ilegal.
En simulaciones, los vehículos con el motor EA 288 no indicaron un fallo en el filtro de diesel, mientras cumplían con los límites de emisiones, dijo Volkswagen, y agregó que el motor no tenía un dispositivo de desactivación ilegal.
Las noticias en 2015 de que había utilizado tales dispositivos para engañar a las pruebas de emisiones hasta ahora le han costado a la compañía cerca de 30 mil millones de euros(dieselgate ) en multas, reparaciones de vehículos y costos legales, y también desencadenó una reacción global contra los vehículos diesel. Se enfrenta a más litigios por el diésel
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